La inspiración de todo lo que tiene un inicio y no sabemos cuando morirá.
La cultura entendida como la adquisición de “saberes”, nos permite ampliar el horizonte tradicional del término. La libertad entendida como una forma de entender la vida sin tener que responder por tus acciones, siempre que no dañes a otro individuo, te hace más humano. Lo leonés entendido como el adjetivo que califica todo lo que se refiere a una tierra, obviando los “ismos” que manchan un precioso nombre, nos invita a soñar. Unidos estos tres vocablos definimos perfectamente lo que pretendemos con este sello (CLL) Cultura Libre Leonesa.
La propiedad intelectual “©” en una sociedad que camina a través de Internet hacia la globalización y el intercambio de conocimientos, cada instante que transcurre, tiene menos sentido. La evolución del ser humano se ha logrado desde el principio de los tiempos compartiendo los avances logrados y este no es el momento más indicado para detenernos en ese transcurrir del tiempo.
La cultura como la sociedad evoluciona..., ¿pero con la misma libertad que lo hace la sociedad?. Vivimos en un tiempo, donde el poder no esta en la inteligencia sino en el dinero, donde los que nos dirigen no están para aprender y mejorar nuestra vida, sino para enriquecerse cada vez más. Dónde el termino social ha dejado de tener un matiz humano para pasar a ser algo inherente a un vocablo vacío y diáfano de todo aquel que se etiqueta como político. Lo que hoy llamamos cultura, ¿tiene algo que ver con la CULTURA de nuestros antepasados? O es que la sociedad y el poder han influido del mismo modo en la sociedad que en la cultura, y el agua cristalina no refleja a los grandes genios sino los que mejor se venden. El marketing, sinónimo en muchas ocasiones de peloteo, ¿debemos entenderlo como un arte para integrarlo en la CULTURA?.
León. ¿Como definir toda una tierra en pocas líneas...?, mi tierra es parte de esa sociedad y de esa cultura en la que vivimos, no creo que pueda salvar muchas almas de este infierno. Pero... Internet ha abierto una nueva sociedad donde los que la formamos podemos hacer que nuestra tierra este gobernada por los mejores gobernantes: nosotros mismos. Seremos los que nos impongamos nuestras reglas siempre que cada uno sea capaz de no romper la regla más básica del ser humano: “No hacer daño a otro ser humano”.
Aquí en mi “Nuevo León” puedo ser libre para pensar, escribir, dibujar, expresar todo lo que muchas veces la sociedad me constriñe. Todos aquí somos iguales, el poder lo tiene la mente y no el dinero, las leyes mundanas dejan de tener su peso en este otro León. Sólo la mente y la destreza de cada uno de los ciudadanos que formamos este territorio podemos reconquistar el tiempo gastado inutilmente, las batallas perdidas y soñar con un mundo mejor.
Este Nuevo León cibernético tiene muchas ventanas en las que asomarse y hoy ha nacido una nueva, que con el paso del tiempo pretende hacerse puerta, para posteriormente ser balcón y llegar a convertirse en el arco iris más grande, donde todo aquel que no haya encontrado su sitio, tenga aquí una nueva oportunidad para decir, contar, pintar o cantar lo que quiera.
León y lo leonés, junto con la cultura serán a partir de este momento los temas que inunden las páginas de este lugar de encuentro, el de todo aquel que quiera rescatar un trocito de historia, antropología, literatura, tradición o saber leonés.
Esta es la casa de todos y el lugar del que todos podremos aprender.
Diego Fidalgo
La propiedad intelectual “©” en una sociedad que camina a través de Internet hacia la globalización y el intercambio de conocimientos, cada instante que transcurre, tiene menos sentido. La evolución del ser humano se ha logrado desde el principio de los tiempos compartiendo los avances logrados y este no es el momento más indicado para detenernos en ese transcurrir del tiempo.
La cultura como la sociedad evoluciona..., ¿pero con la misma libertad que lo hace la sociedad?. Vivimos en un tiempo, donde el poder no esta en la inteligencia sino en el dinero, donde los que nos dirigen no están para aprender y mejorar nuestra vida, sino para enriquecerse cada vez más. Dónde el termino social ha dejado de tener un matiz humano para pasar a ser algo inherente a un vocablo vacío y diáfano de todo aquel que se etiqueta como político. Lo que hoy llamamos cultura, ¿tiene algo que ver con la CULTURA de nuestros antepasados? O es que la sociedad y el poder han influido del mismo modo en la sociedad que en la cultura, y el agua cristalina no refleja a los grandes genios sino los que mejor se venden. El marketing, sinónimo en muchas ocasiones de peloteo, ¿debemos entenderlo como un arte para integrarlo en la CULTURA?.
León. ¿Como definir toda una tierra en pocas líneas...?, mi tierra es parte de esa sociedad y de esa cultura en la que vivimos, no creo que pueda salvar muchas almas de este infierno. Pero... Internet ha abierto una nueva sociedad donde los que la formamos podemos hacer que nuestra tierra este gobernada por los mejores gobernantes: nosotros mismos. Seremos los que nos impongamos nuestras reglas siempre que cada uno sea capaz de no romper la regla más básica del ser humano: “No hacer daño a otro ser humano”.
Aquí en mi “Nuevo León” puedo ser libre para pensar, escribir, dibujar, expresar todo lo que muchas veces la sociedad me constriñe. Todos aquí somos iguales, el poder lo tiene la mente y no el dinero, las leyes mundanas dejan de tener su peso en este otro León. Sólo la mente y la destreza de cada uno de los ciudadanos que formamos este territorio podemos reconquistar el tiempo gastado inutilmente, las batallas perdidas y soñar con un mundo mejor.
Este Nuevo León cibernético tiene muchas ventanas en las que asomarse y hoy ha nacido una nueva, que con el paso del tiempo pretende hacerse puerta, para posteriormente ser balcón y llegar a convertirse en el arco iris más grande, donde todo aquel que no haya encontrado su sitio, tenga aquí una nueva oportunidad para decir, contar, pintar o cantar lo que quiera.
León y lo leonés, junto con la cultura serán a partir de este momento los temas que inunden las páginas de este lugar de encuentro, el de todo aquel que quiera rescatar un trocito de historia, antropología, literatura, tradición o saber leonés.
Esta es la casa de todos y el lugar del que todos podremos aprender.
Diego Fidalgo